A la hora de conseguir un cambio de look, hay varias opciones que puedes considerar. Una de ellas son los reflejos y las mechas. Estas dos técnicas de coloración son muy populares, especialmente entre aquellas que quieren aportar un toque de brillo y luz a su melena.
Pero ¿de qué se tratan exactamente? ¿Cómo distingue una melena con reflejos de una con mechas? Te lo contamos a continuación.
¿Qué son los reflejos?
Los reflejos consisten en aplicar un tono más claro a una melena natural o teñida, pero siempre dentro de la misma gama de colores. Este tratamiento se realiza para dar luz a la melena, aportando una sensación de profundidad y brillo. Además, ayuda a que el color sea más uniforme.
Los reflejos pueden aplicarse de varias formas:
- Cabello entero: el colorista aplica el tono más claro en toda la melena.
- Reflejos californianos: consisten en una sucesión de mechas y reflejos para conseguir un efecto más natural.
- Luces en capas: el colorista aplica el tono más claro en capas para conseguir un efecto más sutil.
Los reflejos se recomiendan especialmente para aquellas que desean aportar luminosidad a su melena, pero sin un cambio radical de color.
¿Qué son las mechas?
Las mechas consisten en teñir la melena con un tono más claro o más oscuro que el tono natural. Este tratamiento suele utilizarse para conseguir un cambio mayor en la melena, ya que permite aplicar varios tonos y conseguir un efecto más llamativo.
Las mechas se pueden aplicar de varias formas:
- De raíz a puntas: la melena se teñe con un tono más oscuro en la raíz y un tono más claro hacia las puntas.
- Color en las puntas: se aplica el tono más claro únicamente en las puntas de la melena.
- Mechas californianas: se aplican mechas con varios tonos para conseguir un efecto natural.
- Mechas californianas con luz: se aplican mechas con tonos claros en la parte superior de la melena para conseguir un efecto de luz.
Las mechas se recomiendan especialmente para aquellas que desean un cambio radical de color en su cabello.
Conclusión
Los reflejos y las mechas son dos tratamientos de coloración muy populares, especialmente entre aquellas que quieren aportar un toque de brillo y luz a su melena. Los reflejos se utilizan para aportar luminosidad sin un cambio radical de color, mientras que las mechas se utilizan para conseguir un cambio radical en la melena.
¿Qué son los reflejos?
Los reflejos son una forma de coloración temporal y suave para aclarar y realzar los tonos naturales de tu cabello. Esta técnica consiste en aplicar una mezcla de una o varias tonalidades de color de manera que sólo se aplique a las puntas de tu cabello, en lugar de teñirlo por completo. Esto quiere decir que tus reflejos no durarán tanto como una coloración permanente, sino que se irán desapareciendo con el tiempo y con el lavado.
Los reflejos son una excelente opción para añadir un toque de color a tu cabello sin arriesgarte a teñirlo de forma permanente. Además, es una excelente forma de darle un toque de luz a tu cabello, especialmente si tienes una melena oscura. Esta técnica también es ideal para aquellas personas que quieren un cambio de look sin tener que comprometer el color original de su cabello.
¿Cómo saber si es una melena con reflejos o una con mechas?
Cuando se trata de distinguir entre una melena con reflejos y una con mechas, lo más importante es mirar la cantidad de color aplicado y la ubicación del mismo. Los reflejos se aplican en las puntas del cabello para dar un efecto de luz, mientras que las mechas se aplican en secciones más grandes de cabello para dar un efecto más dramático.
Para ver si tienes reflejos o mechas, tienes que fijarte en el color. Si el color aplicado a tu cabello es un tono muy similar al color original de tu cabello, entonces es probable que se trate de reflejos. Por otro lado, si el color es mucho más intenso que el color natural de tu cabello, entonces es más probable que se trate de mechas.
Otra forma de distinguir una melena con reflejos de una con mechas es el tamaño de la sección teñida. Los reflejos suelen ser más delgados y se aplican en secciones más pequeñas de cabello, mientras que las mechas suelen ser un poco más gruesas y se aplican en secciones más grandes.
Además, los reflejos tienen un efecto gradual, por lo que los tonos del cabello van cambiando de manera gradual desde la raíz hasta las puntas. En cambio, las mechas tienen un efecto más marcado, con una división clara entre la raíz y el color aplicado. Esto significa que las mechas suelen ser más difíciles de mantener y cuidar, mientras que los reflejos suelen ser más fáciles de cuidar.