¿Quién no quiere tener un acabado de gel en sus uñas sin necesidad de gastar una fortuna? Puedes lograrlo con un simple esmalte normal. El acabado de gel es uno de los looks más populares para las uñas, pero muchas veces la falta de presupuesto no nos deja disfrutar de este tratamiento en un salón. Por suerte, aquí te explicamos cómo pintar tus uñas con esmalte normal para obtener un efecto como el de un acabado de gel.
Para lograr el efecto de un acabado de gel con un esmalte normal es necesario que sigas los siguientes pasos:
- Limpia bien tus uñas para quitarles el exceso de grasa y otros residuos. Esto ayudará a que el esmalte se adhiera mejor.
- Aplica una capa de esmalte base. Esto ayudará a proteger tus uñas y a que el color se vea más brillante.
- Aplica dos capas del esmalte de color que hayas elegido. Dale una capa súper fina para que el color no se vea muy saturado.
- Selladora de esmalte. Esto hará que tu manicura dure mucho más tiempo y que el efecto de acabado de gel sea aún mejor.
Ahora que ya has seguido los pasos anteriores, hay unos tips que debes tener en cuenta para lograr un efecto como el de un acabado de gel con un esmalte normal:
- Utiliza esmaltes de calidad. Esto hará que el resultado sea mucho mejor.
- Utiliza una esponja para aplicar el esmalte. Esto ayudará a evitar que se formen burbujas y a que el color se distribuya uniformemente.
- No te pases con las capas. Aplica una capa fina para evitar que el esmalte se descama.
- Ponte una capa de top coat cada dos días. Esto hará que tu manicura dure mucho más tiempo.
¡Y eso es todo! Si sigues estos pasos, podrás tener un resultado como el de un acabado de gel con un simple esmalte normal. ¡No necesitas gastar una fortuna para tener una manicura perfecta!
1. Cómo Preparar las Uñas para Pintarlas con Esmalte Normal
Antes de empezar, es importante que prepare tu uñas para la aplicación de esmalte. Esto incluye limar y pulir las uñas. Puedes usar un lima para uñas con la forma de círculo para suavizar los bordes de la uña. Esto ayuda a evitar que el esmalte se desprenda fácilmente. Después de limar las uñas, deberás pulirlas. Esto ayuda a eliminar cualquier residuo de polvo o grasa que pueda haber quedado en la superficie de la uña. Esto también ayuda a que el esmalte se adhiera mejor a la superficie de la uña. También es una buena idea exfoliar la piel alrededor de la uña para eliminar la piel muerta.
Después de preparar la uña, es hora de aplicar una base. Esto ayuda a proteger la uña del color del esmalte. Puedes encontrar una base para uñas en la mayoría de las tiendas de belleza. Aplica una capa delgada de la base de uñas en toda la uña. Esto ayudará a que el esmalte se seque más rápido y evitará que el color se desvanezca. Deja que la base se seque completamente antes de aplicar el color.
2. Cómo Aplicar el Esmalte Normal para un Acabado de Gel
Una vez que hayas preparado la uña y hayas aplicado la base, es hora de aplicar el esmalte. Puedes usar un pincel para aplicar el esmalte a la uña. Usa un ligero movimiento de barrido para aplicar una capa delgada de esmalte. Intenta no aplicar demasiado esmalte para evitar que se formen burbujas. Si tienes dificultades para aplicar el esmalte de forma uniforme, puedes intentar usar una esponja para aplicar el esmalte. Esto ayudará a distribuir el color de forma más uniforme.
Una vez que hayas aplicado el esmalte, deberás dejar que se seque. Puedes utilizar un secador de uñas para acelerar este proceso. Sin embargo, si usas un secador, trata de mantenerlo a una distancia apropiada para evitar que el calor dañe la uña. Si no tienes un secador de uñas, deja que el esmalte se seque al aire.
Una vez que el esmalte se haya secado, puedes aplicar una capa delgada de un sellador para darle un acabado de gel. Esto también ayudará a proteger el color del esmalte. Deja que el sellador se seque completamente antes de aplicar una segunda capa de esmalte. Repite el proceso para obtener un acabado de gel perfecto.